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20/01/2012

El Pop Nos Va A Volver A Todos Gilipollas [sp]: Reseña “La Polinesia Meridional”



LA CASA AZUL “POLINESIA MERIDIONAL” (2011)

 

 

Me desvirgo en esta fabulosa aventura llamada (el pop nos va a volver a todos gilipollas)  con uno de los trabajos menos comentados, menos alabado por la crítica y por el popipublico ,  a finales del 2011: Irónia en modo on.

Pues sí, me toca hablar de “la Polinesia meridional”, último, y personalmente creo,  uno de los mejores, trabajos del Patriarca de la formación virtual llamada “La Casa Azul” , Guille MilkyWay.

Parto del punto, que años atrás era un fan incondicional de la misma. El primer Ep, “El sonido efervescente de La Casa azul” , al igual que su primer largo “Tan simple como el amor” produjo en mis oídos y neuronas satisfacciones tan próximas al orgasmo, infinidad de ganas de vivir veranos mágicos, y experimentaciones alucinógenas tan próximas a las ocasionadas por las ingestas de hongos y setas…. ( Suposiciones, claro, cosas que me cuentan…), vamos , que vivía en un gilipollalandia mundo pop por entonces.

Tal cursi mundo de sensaciones fue saboteado y ultrajado de golpe al escuchar el futurista,  y desconcertado album de “ La revolución Sexual”, ya que me recordaba más a la músiquita de las máquinas recreativas en los tiempos donde me moceaba en salas de juegos de mi barrio, que a la sensación retro-hipnotizante que había experimentado en mí con sus primeros discos.  Curioso fue que este personalmente decepcionante álbum, dió a la Casa Azul un puesto en el olimpo del mainstream-Pop!, con intento fallido en Eurovisión, y giras masificadas de neo-popies, y becarios en formación Indie…

Ya pensé que no volvería a creer más en la Casa Azul, que tendría que guardar en en un cajón olvidado, mis camisetas groupies, y tirar mis chapitas a la basura… Decidí embargar mis neuronas menguantes afectadas por ese sonido demoníacamente sintentico.

Tras 4 años, pasando de largo cualquier noticia y evitando escuchar cualquier melodia azul en mis odios, entró de golpe “ La Polinesia meridional”. Disco que ha conseguido reconciliarme con mis recuerdos efervecestentes, luminosos y gilipollescos hacía La Casa Azul.

La Polinesia Meridional se saborea por igual en cada canción. Sigue una línea constante bajo un PoP agitado, brillante, desenfrenado y superacelerado, que hace que no puedas parar de escucharlo. Sabe a poco los 16 temas y más de una hora de duración que tienen el mismo. Te sumerge en un viaje astral hacía un lugar paradisíaco donde todo el mundo baila a golpe de beats discos, con peinados a los 70´s, rodeados de voces a lo más puro estilo bee-gees, y con unas ganas terribles de volver a salir a la calle en verano, merendarte galletas  y comerte el mundo…..vamos, que es obvio que me ha encantado.

No voy a desgranar  una a una las canciones que componen la polinesia, porque ya todos conocemos el ritmo frenético de “los chicos hoy saltarán a la pista de baile”, el grito a cinco voces nostálgico y épico de “ ¿Qué se siente al ser tan joven?, el viaje musical a playas de arena blanca bajo un sol radiante embriagándote de nostalgia  en “ La Polinesia Meridional”, el sentirte como una estrella eurovisiva en mitad de una pista de baile de luces multicolor en “ Colisión Inminente”, y en ñoñear y absorver dotes de superación en la  adictiva e hiptonizante línea de “ Una vida tranquila”. (La voz de Silvia, lider de Niza, hace una labor importante en la misma, Silvia, te adoro).

Así y todo, me quedo con “Fiesta Universal” y “Terry ,Peter y yo”, ya que las considero las más alegres, bailables y envolventes (bajo un tokipunto de vista Dj) , en este entuerto de sintetizadores a lo japo, sonidos retro-efevercentes  y música discotequera, a los que estamos enganchados los habitantes indies de pura cepa, a esta sustancia alucinógena llamada,  la Casa Azul.

Rating: 5/5


 


 

 

 

 

 

 

 

 

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