Interview La Casa Azul
Como músico, ¿qué aporta la música que haces a tu vida? Estas canciones parece que tienen bastante de reconstituyente… ¿O La casa azul es una codificación más de Guille M., no es tu vida la que está expuesta?
Bueno, realmente creo que es un tópico decir que la música tiene poder curativo, pero en mi caso, cuando compongo, inevitablemente busco ese poder analgésico del que suelta las cuatro cosas que le incomodan y se queda más a gusto… Nunca he sido un buen letrista ni nunca he sabido contar historias. Lo único que puedo hacer es hablar de lo que siento en cada momento de forma costumbrista y directa. Me suele costar verbalizar ese tipo de sentimientos, pero es lo que procuro hacer.
¿Es distinto lo que te ofrece la música de otros compositores?
Bueno, en cierto modo quizás, porque escuchar música de otros siempre es algo mucho más relajante y satisfactorio. Me he pasado media vida comprando discos y la otra media encerrado en mi habitación escuchándolos. Es algo vital para mí.
¿Cómo te quedaste al terminar de grabar estas canciones, al entregar los temas definitivos, cerrados a Elefant?
Pues siempre tengo una sensación incompleta, tirando a desagradable, porque no soy capaz de escuchar ningún trabajo que haga sin horrorizarme en mayor o menor medida. Así que siempre es lo mismo, prefiero olvidarlo, no volver a escucharlo nunca más y ya está.
¿Quiénes son tus máximos héroes (pintores, compositores, presentadores televisivos…)?
No tengo héroes.
¿Y tus heroínas? Algunas aparecen en "Esta noche sólo cantan para mí"…
No las tengo tampoco. Las referencias son sólo eso, voces que me han salvado en alguna que otra ocasión. La sensación de sentirse tan cercano al que te canta desde el tocadiscos, que es como si cantara sólo para ti.
Por ser músico y por el tratamiento jovial de tus temas (aunque las letras sean más desarmantes), ¿te ves como un artista con complejo de Peter Pan o algo así?
No, no tengo ningún complejo de Peter Pan. Lo jovial no está reñido con la edad. Asociar la pesadumbre forzada al paso del tiempo es un error cultural, me da la sensación.
¿Es dura la carrera del corredor de fondo? Sin estar solo, eres quien compone las canciones y el único que las defiende en directo… Eso de no tener una banda. ¿Lo echas de menos a veces o te encuentras mejor así?
Claro que lo hecho de menos. Pero bueno, La Casa Azul es un proyecto expresamente irreal y de algún modo, plástico…, no tendría sentido concebirlo de otra manera. Ya tendré tiempo de sentirme más clásico con una banda en otros proyectos en el futuro.
¿De dónde viene tu fascinación por lo japonés? La comida, los cómics manga, su carácter…
Pues como no podía ser de otra manera, solamente viene a través de la música. Me siento muy identificado por la manera de entender la música pop en Japón, por su falta de prejuicios y la no negación de cualquier tipo de referencia musical que uno pueda tener, la manera en que todo se mete en una batidora de la que, con una disciplina asombrosa, salen gemas de música pop innovadora, diferente y emocionante. Hay treinta mil grupos actuales de música en Japón con los que me podría sentir muy identificado.
¿Podrías recomendarnos algún disco nipón? ¿Has estado allí más una de vez, verdad?
Bufff, es que recomendar discos siempre es complicado. Por decirte algunos grupos, de los más conocidos, no sé… Plus Tech Squeeze Box, The Aprils, Hazel Nuts Chocolate, Capsule,… Buff no sé. Ochenta mil más. Estuvimos hace dos años tocando en Tokyo, en el centro de Shibuya, y llenamos las dos noches. Fue algo increíble, ver la absoluta sintonía que existía con el público tokyense. Hice muchísimos amigos allí, con los que sigo manteniendo contacto. Habrá ocasión de volver pronto.
¿Estos últimos días de qué canción te sientes más cerca? ¿Por qué?
Pues no sé muy bien por qué razón, pero en los últimos tiempos no paro de escuchar "Voce abusou" de Clara Nunes con Toquinho; algo tan sublime, trágico y estremecedor le aplasta a uno el corazón. También he estado, de nuevo, enganchado a "Her song" de Colin Blunstone. Me siento así hacia alguien.
¿Y cuál es el disco (los discos) que más estás escuchando en estas semanas?
Últimamente he estado escuchando el último disco de Maia Hirasawa, que también resulta muy invernal y emocionalmente reconfortante, el de Friday Bridge, gélido y precioso, el de The Nines. No sé… siempre estoy intentando escuchar música, pero soy despistado y no te sé decir muy bien. Bueno, cosas clásicas también: Chet Baker, Bergen White, Dennis Wilson, Mark Eric, Spiral Starecase, Paige Claire… Todo muy invernal como ves.
¿Cuánto tiempo te ha costado sacar adelante estas canciones?
Bueno, no mucho en realidad. Supongo que el justo. Creo que no es un tema de costar más o menos. Supongo que todo artista cuando se pone a ello, pues se pone y ya está. En mi caso, intento que no dure más de lo necesario porque me vuelvo loco, y realmente si estuviera más tiempo del que estoy nunca acabaría haciendo nada, me sentiría permanentemente frustrado y ya sólo me faltaba eso.
¿Los chicos de las fotos de promo son los mismos que han vestido tu carrera estos años?
Bueno, son los androides que hacen más amable la entrada al irreal mundo de La Casa Azul. Siempre han estado ahí, sí. Por suerte.
¿Quién es el primer juez de tus canciones? ¿Quién testea las canciones por primera vez?
Evito eso con todas mis fuerzas. No quiero jueces. Sufro y no merece la pena. Las canciones están ahí y a quien le interese, pues las escucha y si a alguien le sientan bien, pues mejor que mejor.
¿Te gusta dar conciertos o preferirías –si fuera posible- sólo publicar discos?
Por supuesto preferiría solamente publicar discos. Pero de eso no se vive. Y de lo otro, a duras penas.
¿Tienes algún hábito a la hora de componer?
Miles de hábitos y vicios. Pagaría por deshacerme de ellos.
Al cantar en castellano, ¿das muchas vueltas a las letras de las canciones?
Como te he dicho antes, me considero mal letrista. Aún así, no creo que dar vueltas a las letras sea un problema de utilizar un idioma u otro. Yo les doy vueltas porque me cuesta un universo verbalizar las cosas que siento y que quiero expresar en mis canciones.
¿Te resulta natural escribir?
Cada vez más por suerte. Pero no es en lo que me siento más suelto. Mi forma natural de expresarme es la música.
¿En qué ciudad vivirías si pudieras?
Estoy bien en Barcelona. Aunque sueño con las playas de Waimea.
¿Cuáles han sido tus referencias a la hora de componer este nuevo álbum?
Pues no tengo ni idea. Sé a lo que suena, pero normalmente no son cosas que un artista haga premeditadamente. Lo único premeditado ha sido ese forzar todo para que suene más barroco y artificioso. Algo que me satisface aunque pueda resultar engorroso para algunas personas.
La música tiene en La casa azul una vertiente lúdica, desenfadadamente bailable que se están perdiendo en el panorama "independiente" español… ¿te sientes, en algún sentido, una rara avis? Lo que está claro es que sigues con las mismas coordenadas que al comienzo (ahora más extendidas, claro).
Buff. Ni idea, no soy nadie para juzgar el panorama de la música en España. Yo creo que hay de todo como en todas las épocas, para todos los gustos y de todos los estilos. No me siento ninguna rara avis, yo hago lo que quiero y creo que hay espacio para todo el mundo. Lo demás sería creerse más de lo que soy.
Viéndote en directo, la gente puede pensar "esto lo puedo hacer". Claro, luego nadie se lanza… ¿Pero cuáles son las mayores dificultades que te encuentras respecto a las canciones? Quiero decir, algunas están más elaboradas, más trabajadas de lo que se puede creer el público. De hecho, eres tú mismo quien hace las veces de productor.
Bueno, ese es mi trabajo básicamente, producir. Es en lo que me siento cómodo de verdad junto con la composición. Soy un mal intérprete y creo que no hace falta ser muy avispado para darse cuenta. A mí no me importa que alguien crea que lo que hago es fácil o difícil. No resulta significativo para mí. La música no es fácil o difícil. Es emocionante, bonita, o fría, o delicada, o pesada o arrolladora… Ya sabes a lo que me refiero. Una vez hablé con una persona que decía, "buff, esta canción es malísima, mira te la saco en un momento con la guitarra, es súper fácil". No era una canción mía, pero era una canción que para mí es una belleza de canción. La persona esta yo supongo que no es consciente de que el 90% de las personas con un cierto (mínimo) oído sacan cualquier canción en cualquier instrumento en 10 segundos. Siempre he creído que valorar la música en estos términos es profundamente pueril y superficial. No me interesa ese discurso. Carece de sentido para mí.
¿Vas a introducir alguna novedad en tus directos?
Hay novedades a nivel visual. Me gustaría que el directo fuera una experiencia más completa. Que sumergirse en el irreal mundo de La Casa Azul fuera más fácil y no requiriera de tanta imaginación.
¿Tienes preparada alguna nueva versión?
Bah, depende del día. En cualquier caso, si las hago, deberían ser versiones de canciones festivas supongo... Que no estoy yo para tristezas.
¿Hay algo que siempre te lleves de gira?
Farmanutrientes.
¿Eres más de vinilos que del Soulseek?
Creo que es perfectamente compatible.
¿Por qué titular el disco así, "La revolución sexual"?
Pues no lo sé, supongo que siempre son cosas un poco casuales. Coincidió que en la época que estaba componiendo y grabando el disco cayó por mi salón el ensayo de Reich, y lo leía por las noches. Y pensé que, en el fondo, en este disco, estaba hablando de liberación, en sentido genérico. Al menos para mí. Supongo que la tercera revolución nunca se terminó de llevar a cabo, como realmente ninguna de las otras dos... Pero son conceptos teóricos bonitos.
¿Qué dirías si pudieses fastidiar, murmurar, criticar? ¿Qué te molesta?
Me molesan tantísimas cosas que veo, oigo y percibo que me siento como una persona muy mayor, criticándolo todo en mi interior. Y esa es una parte de mí que no me gusta nada. Así que generalmente en el día a día, yo utilizo muchísimo la expresión "prefiero no", como no queriendo dar rienda suelta a este tipo de cosas, porque creo que no sirve absolutamente para nada…. Así que ni voy a fastidiar, ni a murmurar ni a criticar.
¿Y qué te fascina además de hacer música "efervescente"?
Bueno, no tengo muy claro si hago música efervescente. Lo que sí me hace muy feliz es poder vivir haciendo música.
13 canciones. ¿No eres supersticioso, verdad?
No soy absolutamente nada supersticioso. Aunque sí un poco neurótico y aprensivo.
¿Algún descarte? ¿Guardas alguna más grabada para un futuro single?
Sí claro, muchas, unas cuantas, sí… Ya irán saliendo espero. Y si no, pues allí se quedarán, ¡desamparadas!
Texto: Gorka Elorrieta
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La Casa Azul [Club Cultura]
picture: Archivo Elefant
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