El LP es una Edición Limitada en Vinilo Blanco **Incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
Es todo un acontecimiento para Elefant Records pero al mismo tiempo un lanzamiento que, de alguna manera, consigue cerrar un círculo que casi nadie sabíamos que estaba abierto. La magia de la música. El caso es que el nuevo álbum de Soleá Morente, producido por David Rodríguez, cumple la regla aquel…
El LP es una Edición Limitada en Vinilo Blanco **Incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
Es todo un acontecimiento para Elefant Records pero al mismo tiempo un lanzamiento que, de alguna manera, consigue cerrar un círculo que casi nadie sabíamos que estaba abierto. La magia de la música. El caso es que el nuevo álbum de Soleá Morente, producido por David Rodríguez, cumple la regla aquella de los terceros discos: álbumes de reafirmación, de madurez, de desarrollo. Y es que por primera vez la propia Soleá ha tomado un papel protagonista en la composición de alguna de las canciones del disco, un trabajo que despide aromas exóticos y enraizados, pero con un sentido pop absolutamente excepcional y maravilloso. Porque Soleá Morente es un personaje único en el panorama musical español. Sí, porque es hija del mítico cantaor flamenco Enrique Morente y la bailaora Aurora Carbonell, pero también porque la mediana de los Morente siempre ha sabido ser permeable a otros estilos y referencias musicales. De este modo, en este disco también aparecen acreditados como compositores Ana Fernández-Villaverde (LA BIEN QUERIDA), David Rodríguez (LA ESTRELLA DE DAVID) y J (LOS PLANETAS). Cóctel exquisito. Círculo cuadrado.
El resultado de semejante colección de titanes de la escena nacional es un conjunto de canciones que tienen a la rumba como guía principal sobre la que recorrer una serie de historias y referencias musicales muy diversas y ricas. Pero, las primeras líneas son para una canción que merece un templo en sí misma, una de las tres canciones que aporta Ana Fernández-Villaverde para este disco. No da título al disco por nada. “Lo Que Te Falta” es una de esas canciones que es un hallazgo irrepetible. El tiempo la hará mítica e inolvidable. La manera en que Soleá mezcla la pasión y el arrebato que lleva impregnado su apellido, con el espíritu noise de la guitarra de David Rodríguez, crea un camino lleno de intensidad y de algún modo paralelo a los espacios abiertos que dejó aquel venerado “Omega”, pero con una personalidad especial y única. Y para colmo esa letra, que se clava dentro como sólo se puede clavar un quejío, cuando la Granaína grita: “Si con lo que tienes no consigues ser feliz / Jamás podrás llegar a serlo con / Lo que te falta”. Demoledora. Grandiosa.
Pero no es el único tema que se sale de los cánones, y ahí va “Coca-Cola”. Un tema que baila entre el raï y la rumba, que da un toque diferente a las influencias árabes que en ocasiones han poblado la música de Soleá. O ese bolero maravilloso que es “No Puedo Dormir”, un ejercicio de delicadeza absolutamente entrañable y emocionante, con ese final acelerado con los coros de José Ubago “José Bonaparte” y LAS NEGRIS, algunos de los colaboradores de un disco que abunda de ellos. También “Pero Es De Noche” incide en ese flamenco con distorsiones e intensidad, con el apoyo de los coros del hermano de Soleá, Kiki Morente. Otra maravilla es “Cosas Buenas”, que ya habíamos adelantado hace unas semanas, con esa granaína adaptada por la propia Soleá que abre la canción para después dar paso al exquisito arreglo de piano de Carles Viarné y el acompañamiento pop de CARIÑO.
Y de rumbas trotonas, bien redonditas y ocurrentes, el disco va bien trufado. EL PESCAÍLLA y Peret rebosarían de alegría viendo como crece la niña de sus ojos. La inicial “Cariño”, escrita por David Rodríguez y publicada en el último álbum de LA ESTRELLA DE DAVID, es una canción llena de ironía y mala leche, necesitaría que citásemos todas sus frases para hacer justicia y poder contextualizar adecuadamente su portentosa letra. Qué manera tan maravillosa de desgranar una relación desmedida, pero llena de amor. “Viniste A Por Mí” se va al otro lado con un ejercicio musical de manual, pero a golpe de despecho, con las guitarras trotonas de Eduardo, Víctor y MUCHACHITO BOMBO INFIERNO. Y lo de “Ducati” es directamente alucinante. Una letra pícara y rebosante de sarcasmo que hace uso de un trozo de la letra del “Ducati Luv” de YUNG BEEF y SOMADAMANTINA, y que acaba con las CARIÑO soltando un coro tal que así: “Papi, ya no quiero Ducati / Sólo te quiero a ti / Si te pillo infraganti / Llámame religiosamanti”. Actitud. Y algo parecido le pasa a “Tutti Frutti”, otro nuevo ejercicio de autoafirmación lleno de sentido del humor. ¡Ay, si Elvis levantase la cabeza! ¡No podría parar de bailarla!
Otro ejercicio de reciclaje musical va en “Mundo Nuevo”, en este caso con una estrofa de “Una Gitana Del Rastro” de PARRITA. Y el ventilador que no para de girar incansable. Lo mismo que “Olvidarme De Ti”, donde Ana Fernández-Villaverde deja en la letra su huella clara e inconfundible: sensibilidad, redención, fatalismo y decisión. El disco lo cierra un tema muy especial, “Condiciones De Luna”, escrito por la propia Soleá junto con J (LOS PLANETAS). Otro cambio de tercio que demuestra que “Lo Que Te Falta” dista mucho de un ejercicio de estilo: una obra ambiental presidida por los teclados de David Rodríguez y Ángel Valiente, arropada por los coros de Estrella Morente y Ángel Valiente y con un fraseo particular, con el flow ágil de DELAFÉ, pero la personalidad melódica e interpretativa de Soleá. Otro nuevo hallazgo, otro terreno inexplorado.
Es difícil poder explicar con palabras, estos discos tan ricos en referencias, estilos y matices, capaz de unir parámetros musicales que originariamente podrían estar a kilómetros de distancia, y que se encuentran con genialidad y excitación, con emoción e inteligencia. Son discos que sólo se explican a través de la personalidad de su intérprete y también, en esta ocasión, por el estilo y el talento de David Rodríguez, su compañero de viaje en este disco, productor de todas las canciones, compositor de algunas y figura imprescindible para entender el sonido del álbum. Pero además Soleá y David han estado bien escudados: por las guitarras de Eduardo Espín Pacheco y Víctor Iniesta; por las percusiones de Ginés Pozas y Popo Gabarre; por el bajo de Julián Méndez “Checopolaco”; y por los enérgicos coros y jaleos de LAS NEGRIS, Rocío Morales, José Bonaparte, Tomasito, Kiki Morente, Antonio Carbonell, las CARIÑO o Miryam Levy entre muchos otros. ¿Al final? Algo que nos faltaba. No lo sabíamos, pero nos hacía falta.