ALEJANDRO DÍEZ ‘COOPER’ MÚSICO

«Los Flechazos no se van a reunir»

El leonés Cooper desembarca hoy, a las 13.00 horas en Espacio Vías, con ‘La gira del aperitivo’, con incluso vermú posterior para el que quiera en el hotel Quindós. «Es una buena sensación esto de salirte con la tuya». Es el «no» más positivo que se puede decir sobre Los Flechazos.

PACHO RODRÍGUEZ | LEÓN 19/04/2015

—Lo de volver a ver discos en vinilo apilados para vender, lleva a pensar: ¿nos hemos perdido mucho de aquellos tiempos en los que era un disco, varios amigos y una casa que tuviera tocadiscos?

—Yo intento comprar pocos discos y escucharlos mucho. Me gusta pensar que el Record Store Day que se celebra este sábado no es solamente el Día de las Tiendas de Discos, sino también el día de los «aficionados». Me gusta pensar que la industria musical hace quince años estaba más preocupada por vender mucho que por vender cosas buenas y eso siempre lleva al mínimo común denominador. Y ahora se vuelve a cuidar el catálogo, las ediciones, los detalles. Que una multinacional como Warner edite un disco tan chulo como este de Los Flechazos, con tapa doble, vinilo de 180 gramos, temas extras, profusión de material gráfico inédito, copias limitadas… No es la solución mágica, pero sin duda marca un cambio de tendencia. Si todo este esfuerzo lleva a que volvamos a quedar en casa para escuchar juntos nuestros discos favoritos alrededor de un café o una paella… mejor que mejor.

 —Y en cuanto a Los Flechazos, ¿cómo ha resultado esta aventura de 2015? 

—Los discos del grupo llevaban descatalogados mucho tiempo. Demasiado si tenemos en cuenta la demanda y los precios astronómicos que han llegado a alcanzar en las ferias de coleccionismo. Desde el momento en que Warner se pone en contacto con nosotros, queda claro que el disco que ellos quieren reeditar primero es el «Preparados, Listos, Ya!». ¿Éste? Pues genial… cualquiera, la verdad, me vale para empezar. A partir de ahí ha habido que rebuscar en el archivo, en el de casa y en el de dentro de la cabeza. Y creo que se ha preparado una edición preciosa y muy respetuosa a la vez. Yo estoy muy contento: para un autor es casi una necesidad vital que el público tenga acceso a tu obra. Cuanto más fácil, mejor.

 —¿Habrá reunión de Los Flechazos para tocar sus canciones?

—No.

 —Ha vuelto a las canciones que ahora regresan en vinilo, ¿ha habido flechazo instantáneo? 

—Para escribir las notas del interior de carpeta me puse el disco otra vez, claro. Hay cosas que me gustan mucho, y me siento más cercano al Álex de esta etapa de Los Flechazos que al del comienzo. Yo, como me conozco, he detectado una mezcla curiosa, de «semi-madurez» y tranquilidad emocional (estoy pensando en No Quiero Verte Lloraro en Lo Conseguí) a la vez que un baile de testosterona irrefrenable en canciones como Chicas, Chicas, Chicaso Ella Me Hace Enloquecer.

 —¿Hay canciones que pasan mejor el corte?

—Sin duda. Mis favoritas son No Soy Yo, No Quiero Verte Llorar y Luces Rojas. Pero, en general, el disco es muy chulo. Yo no me reconozco, pero ese yo que ya no soy yo no lo hizo mal…

 —Este fin de semana, concierto al mediodía. Suele comentar lo bueno de estas citas en la que da tiempo a más cosas que en los conciertos nocturnos....

—Busco nuevas fórmulas para llegar a la gente, soy de los que piensan que la música pop se puede disfrutar en diferentes momentos (del día, y de la vida). No quería hacer conciertos para niños, tampoco son exactamente conciertos para la familia. Son conciertos para todo el mundo; tan sencillo y tan difícil de explicar a la vez, ¿no? La música al alcance de la gente. No me quedaba otra; cada vez soy menos noctámbulo y sé que lo que yo busco también lo buscan otros. La Gira del Aperitivo ha sido un exitazo para Cooper, sobre todo porque hemos metido el doble de público del que solemos convocar en un concierto «clásico». Hemos actuado en Sevilla, Madrid, Barcelona, San Sebastián, Zaragoza, Valladolid, Oviedo, Valencia… Y ahora aquí en León, también. Y hemos sido los primeros. Otra vez. Gira virtual por Internet en 2011, Gira del aperitivo en 2014/15. Es una buena sensación esto de salirte con la tuya…

 —Las nuevas canciones son Cooper sin ninguna duda. ¿Lo de los conciertos matinales o al mediodía le condicionó algo a la hora de componer?

—No, no había pensado en el formato de presentación del disco antes de grabarlo. Las canciones de UHF, el último trabajo de Cooper (que es el otro disco que se reedita para el Record Store Day en el que yo estoy implicado) partieron de una necesidad mía de tocar en directo. No quería hacer un álbum entero porque me daba pena tener que prescindir de canciones antiguas, que es lo que siempre pasa cuando presentas disco nuevo. Y a la vez no podía salir de gira sin canciones frescas. Así que me abracé una vez más a este formato de mini LP que siempre me saca del atolladero. Alguna es buena para tocarla en formato acústico, y para los momentos tranquilos. Otras son más explosivas… Nos ayudan a transmitir que los conciertos del Aperitivo son también eléctricos y atronadores a veces.

 —Como no son flamencos, cantan igual por la mañana, ¿no?

—Cuesta, cuesta. Pero también es agradecido: terminas de recoger a las cinco de la tarde y te queda el resto del día libre. Es más humano, más natural si quieres. Y consigues que todo el mundo diga eso de «pues no pensé yo que…».