Diario De León [Es]: «No ser masivos nos permite ser libres» [Interview]
ANA FERNÁNDEZ-VILLAVERDE ALMA MÁTER DE LA BIEN QUERIDA
«No ser masivos nos permite ser libres»
La Bien Querida mantiene el fulgor del principio. Ana Fernández-Villaverde, que era pintora, empezó a tocar la guitarra por su cuenta, y animada por J de Los Planetas, a componer. Y en eso está unos diez años después. La inercia es una virtud en ella, puesto que, en el tiempo que pasa volando, lo que hace conserva algo así como un bien entendido glamour indie. Si fascinó con aquel Romancero, primer larga duración, los discos han pasado como una revolución serena. Llega a León por primera vez, y en acústico, que es un formato al que siempre vuelve. Su último disco: Premeditación, nocturnidad y alevosía. Y su primera vez en León, hoy viernes en el Gran Café.
—¿Hubo que animarle mucho para que se dedicara a esto?
—Mucho no. Empecé sola. Me dio por tocar la guitarra y aprender por Internet. Hacía versiones, y J, de Los Planetas, fue el que me animó a componer. Fue una llamada de atención, porque lo admiraba mucho. Y luego cuando oyó las canciones me dijo que le habían gustado.
—Cuando dio a conocer las canciones, ¿su planteamiento era el de asegurarse de que iban a gustar?
—Mi planteamiento inicial no era gustar sino que me gustaran a mí. Estaba empezando. Las colgué en myspace y David Rodríguez (Beef) se lo comentó a Luis Calvo, de Elefant Records, y me ficharon.
—Visto ahora, parecería que usted y la compañía de Luis Calvo estaban hechos el uno para el otro...
—Tal y como es la industria discográfica, Luis es súper honesto y buena persona. Y encima lo es con los músicos. Aprecia y admira a los músicos. Y se sigue emocionando cuando le presentas algo y le gusta.
—Mantiene el grado de interés de aquel prodigioso ‘Romancero’, su primer elepé. ¿Es difícil ese equilibrio?
—Ese disco es el más escuchado de los míos. Puede que el interés se deba a que intentamos no repetirnos. Si nos repitiéramos, hasta nosotros nos aburriríamos de nosotros mismos... No haber dado un salto a un público más masivo nos permite ser libres.
—Llega en formato acústico. ¿Eso es volver a los orígenes?
—En acústico tocamos las canciones desnudas. Al principio, lo pasaba peor. Ahora, la verdad es que la gente se lo pasa muy bien. Y nosotros disfrutamos mucho.