iCult [sp]: Concert in Barcelona, Previous inteview by Nando Cruz
«Ahora toca cobrar menos y cantar más»
N. C.
–Tras 25 años de carrera, ¿qué espacio ocupa la música en su vida?
–Hace tres años renuncié a mi plaza de funcionario y me dedico a disfrutar de la vida con una gran presencia de la música. Pero no solo con Cooper: también con el libro Club 45, montando la editorial...
–Menudo cambio. En el 2001 declaraba que no se quería sentirse nunca más atrapado por la música.
–Intento plantear todos los proyectos sin ninguna pretensión, sin intención de volver a primera línea del negocio musical. Es casi como una profesión otra vez. Pero igual me arrepiento dentro de tres años.
–¿Por qué renunció a su plaza en la concejalía de fiestas de León?
–Era un trabajo ingrato y con poco reconocimiento. Organizar unas fiestas que no dejan contento a nadie es muy frustrante. Y si mi trabajo es decidir si viene Bisbal o Bustamante, me da igual uno que otro.
–En su puesto debió de tener que defender la necesidad de invertir dinero público en actos culturales.
–Y aún tengo que hacerlo en los foros más inesperados. Para mí el trabajo del artista es ayudar a que las personas tengan una vida un poco más interesante. Y creo que toca volver a la manera tradicional: tocar más, cobrar menos y hacer canciones para que la gente sea feliz.
–Desde que disolvió Los Flechazos sigue alérgico al sonido del teclado.
–La identidad de Cooper la dan las dos guitarras. El productor me animaba a tocar la guitarra acústica, pero yo quería un disco aún más ruidoso. Como el último de Superchunk.
– Explique el tema Primer día.
–Habla del primer día de escuela de mi hija. Los compases iniciales quieren amplificar ese momento de susto y de angustia de la niña al entrar allí y no saber cómo salir pitando.
–Hoy también actúa Parade.
–Le respeto mucho. Es otro superviviente, otro tío con su universo propio. Y me da pena que coincidamos. Tengo amigos dudando de a cuál ir.