Edición Numerada y Limitada de 500 copias en formato LP [Vinilo Azul Marino] **El vinilo incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
Ya lo anunciábamos con ese adelanto que fue el single “Say You Love Me”: los escoceses ATTIC LIGHTS tienen nuevo disco y tras haberse convertido en una de las mejores noticias que le han ocurrido a la música pop en los últim…
**Últimas copias del formato LP
Edición Numerada y Limitada de 500 copias en formato LP [Vinilo Azul Marino] **El vinilo incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
Ya lo anunciábamos con ese adelanto que fue el single “Say You Love Me”: los escoceses ATTIC LIGHTS tienen nuevo disco y tras haberse convertido en una de las mejores noticias que le han ocurrido a la música pop en los últimos años, ahora editan su segundo álbum, “Super De Luxe”, en Elefant Records. El disco ha contado con la producción de Francis Macdonald (TEENAGE FANCLUB, NICE MAN) y John McLaughlin, que también ha producido a grupos como ECHO & THE BUNNYMEN y ha trabajado con artistas que van desde GLASSVEGAS al mismísimo Lamont Dozier. Jim Lang, ha colaborado también en la producción del disco y se ha convertido ya en miembro de pleno derecho del grupo que lideran Kev Sherry y Colin McArdle. Y aquí lo tenemos, titulado como el Jukebox que Tim Davidson, guitarrista del grupo, tiene en su piso y que para el grupo ha acabado representando momentos de placer y relax tras intensas sesiones de composición y grabación para dar forma a este increíble nuevo álbum. Una inyección de energía, repleto de guitarras poderosas que empujan hasta el cielo unas melodías que disfrutan de ese aura luminosa y vitalista que da el haber crecido en Glasgow.
Y como buena muestra la mencionada “Say You Love Me”, que abre aquí también el disco y con ello la veda de potenciales singles que abundan y campan a sus anchas por un disco de escucha ágil y tremendamente entretenida. Épica desatada, pero con un delicioso deje cincuentas en su melodía principal (que parece heredado de la inspiración de CAMERA OBSCURA, que por cierto, habían remezclado previamente “Bring You Down” en uno de los primeros singles de ATTIC LIGHTS, junto a MOGWAI: ese toque inigualable de la escena escocesa del que hablábamos antes), para describir la escasa distancia que existe entre el amor y el odio, y cómo un simple gesto puede hacernos pasar de un extremo a otro. “Future Bound” juega con el funk y el soul para acabar desplegando una melodía que se sitúa entre la fantasía armónica de THE BEACH BOYS y la adictividad pop de THE LEMONHEADS. Resulta irresistible corear repetidamente el estribillo de esta canción, situación que no va a ser un rara avis en este disco. “Breathe For Me”, que también pudimos escuchar en el single de adelanto, vuelve a poner la emoción a flor de piel y los estribillos como el punto de inflexión clave de una canción. Las apariciones y desapariciones de unas guitarras que enamorarían al mismísimo Ken Stringfellow, y que apelan al espíritu de Alex Chilton, acaban poniendo el acento necesario para conmovernos intensamente. “Stay Before You Leave” nos deja otro toque de soul-pop saltarín y efectivo, con unos juegos vocales que serían la envidia de los canadienses SLOAN, mientras que “Mona Lisa” se une a la colección de estribillos inolvidables, que disparará las alarmas de los fans de THE CARS y REDD KROSS.
“Don’t You” vuelve a las guitarras más fieras, pero manteniendo esas armonías que les han emparentado en tantas ocasiones con TEENAGE FANCLUB o FOUNTAINS OF WAYNE, y que han provocado calurosas y elogiosas críticas de revistas tan prestigiosas como Mojo, Uncut, Q, NME o The Guardian. “Hit And Miss” es una maravilla que se balancea entre los mejores momentos del Nick Lowe más imberbe y THE BOO RADLEYS, un acierto que vuelve a brillar con unas voces que vuelan de nuevo a gran altura, con el espíritu sixtie que impulsaba las más brillantes composiciones de THE SMALL FACES, y jugando con el título de la canción, podemos decir que es todo un acierto en el que no cabe fallo alguno. “Lock Me Out” es la única concesión a los tiempos lentos en todo el disco, un dulce y melancólico respiro que nos evoca a unos TRAVIS vestidos de gala entre elegantes y reverberadas guitarras, grupo con el que, por cierto, los propios ATTIC LIGHTS han compartido escenario en varias ocasiones. “Orbison”, un homenaje especial a Roy Orbison, vuelve a ponernos en la estela del mejor power pop, entre el Elvis Costello más ardiente y THE RASPBERRIES poniendo los termómetros al rojo vivo, y disparando una vez más nuestra euforia hasta límites insospechados. “Gabrielle” cierra el disco con el toque más beatleiano, demostrando la habilidad de la banda escocesa para sonar tremendamente actuales y su adoración por Paul McCartney, pero sabiendo asimilar inteligentemente influencias muy diversas, dejando pruebas de ello en arreglos, voces y melodías.
En definitiva, un disco portentoso, de alto voltaje emocional, de esos que te permiten volver a creer en la fuerza de la música. Una gran noticia para los fans de la banda escocesa, que recuperan sus composiciones, después de más de cuatro años de espera, en una forma realmente envidiable. Un disco del que en Elefant Records estamos realmente orgullosos.