Papa Topo

Música
Papá Topo: ´No queremos que ´Oso panda´ sea un Chiki-Chiki´

Myspace y Youtube hicieron universal el indie pop casero de Adrià Arbona y Paula Demaiz. Ya fichados por Elefant Records, crecen en el studio 
de Guille Milkyway

CARLES MULET. PALMA. Sólo Adrià Arbona (1992) y Paula Demaiz (1992), Papá Topo, viven inmunizados a su Oso panda, una canción que resulta imposible no tatarear tras descubrirla. Primero fenómeno Myspace, después maqueta casera, blogs y Youtube, permitió localizar en Binissalem a un grupo que desde hace dos años evoluciona agarrado a un indie pop que no quiere quedarse en los estribillos de piruleta. Recién fichados por el sexto sentido de Elefant Records, y tras casi agotar un primer single 7" con dos canciones, ya preparan su segundo EP, seis temas de nuevo revisados y remezclados por el Casa Azul Guille Milkyway. 
"Es la tontería más grande jamás escrita. La intención era divertir, no hacer algo profundo. Nos da algo de miedo que sólo se nos conozca como el grupo de Oso panda, no queremos que sea una especie de Chiki Chiki". En Papá Topo en absoluto reniegan de su canción estilete. Reconocen, de momento, su dependencia mediática. Y aseguran estar "flipando" con la repercusión de su primer videoclip oficial, realizado por Llaüt Digital, con casi 30.000 visitas Youtube en apenas una semana de cuelgue. Con todo, Arbona y Demaiz matizan sus intenciones musicales, siempre dentro del indie pop, aunque mucho más allá de la ñoñería y los instrumentos de juguete donde se les tiende a encasillar.
"No es cuestión de ponerse místicos, pero tampoco de repetir melodías y una temática fija". Habla él, creador de un Papá Topo que comenzó solo, con el movimiento indie C86, los años 50 y 60 y My Bloody Valentine entre sus músicas de cabecera. "De todo cogemos un poco", reconoce el teclista, compositor y, a ratos, voz del mismo grupo de Lo que más me gusta del verano es poder tomar helado.
"Instrumentación nueva, alguna trompeta, más distorsión...". Así anticipan Adrià y Paulita que sonará una parte de su nuevo EP, que incluirá –algo reformadas– La chica vampira y Robot, ya conocidas. Respecto a Guille Milkyway, con el que graban y se dejan aconsejar en Madrid: "Todo perfecto. Ha entendido el sonido que buscamos. Se nota que está en la producción, pero las canciones siguen siendo las nuestras". 
"Poco a poco". Así camina el Papá Topo, a pesar de que las oportunidades han llegado "muy rápido", afortunadamente de la mano de una discográfica les comprende y que no presiona depredadora. "Entienden que somos muy jóvenes, son conscientes de que estamos estudiando. Nos han dejado llevar el ritmo".