Tiempo, temperatura, agitación

COOPER

Después de más de tres décadas vociferando a los cuatro vientos su amor eterno por el estribillo alcalino de azúcar y perfectas hechuras pop, Alex Cooper retoma el pulso con Tiempo, temperatura, agitación, una nueva muestra de revisionismo vital.

Qué: EP (Elefant)

Fue hace dos años cuando Alex Cooper se preocupó de ofrecer un somero repaso en directo de sus treinta años de carrera, de Los Flechazos a Cooper, por medio de la gira «30 años viviendo en la era pop». Tras este jugoso viaje a lo largo de su discografía, nada ha cambiado. ¿O acaso alguien esperaba lo contrario?

Y es que Cooper no está para seguir hypes ni modas itinerantes. Lo suyo es pura devoción por la liturgia pop sembrada entre los años sesenta y setenta. Del arreón mod a la gasolina pop marca de la casa, con chispazos funk de lisergia madchesteriana como en Dos grados bajo cero,que nadie vaya a pensar que su fijación hacia el pantalón a rayas y el flequillo welleriano le estrecha las miras hacia zonas menos reconocibles de su vasta cultura musical.

La misma de la que se sirve para avivar los fogones de la inspiración y soltarse con piezas como Islandia, por la que matarían los mismísimos Guided By Voices, y a la que escudan otras nueve golosinas a las que siempre se puede echar mano cuando la tristeza asoma por la ventana.