ER-1220LP [Descatalogado] / CD Digipak / Álbum Digital [MP3]
Edición Numerada y Limitada de 500 copias en formato LP [Vinilo Naranja] **Este vinilo incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
¿Es posible, después de más de 30 años de carrera, decir que Duglas T Stewart ha hecho en 2017 su mejor álbum? Está claro que el factor sorpresa de discos como “C-86” o “Life Goes On”, o incluso de sus primeros singles en el sello “53rd And 3rd” o…
Edición Numerada y Limitada de 500 copias en formato LP [Vinilo Naranja] **Este vinilo incluye una descarga digital gratuita en MP3 [320 kbps]
¿Es posible, después de más de 30 años de carrera, decir que Duglas T Stewart ha hecho en 2017 su mejor álbum? Está claro que el factor sorpresa de discos como “C-86” o “Life Goes On”, o incluso de sus primeros singles en el sello “53rd And 3rd” o el single “Serious Drugs” de 1992, quedan ya muy lejos. Pero objetivamente, la colección de canciones incluidas en “BMX Bandits Forever” puede que sea la mejor que haya visto la luz de toda su discografía. Sin renunciar a sus señas de identidad, a sus constantes e incluso a sus “manías”.
Si acabas de aterrizar ante esto de los más de 30 años de carrera, debemos recordar una serie de cosas antes. BMX BANDITS son el alias de Duglas T Stewart, que venía de formar parte de THE PRETTY FLOWERS (¿está “Sing Street” basada en ellos?), banda que compartía con Frances McKee (THE VASELINES), Sean Dickson (THE SOUP DRAGONS) y Norman Blake (TEENAGE FANCLUB, BMX BANDITS). La primera gira de OASIS por Gran Bretaña fue como teloneros de BMX BANDITS, en la época en la que el grupo formaba parte del rooster de Creation Records, cuando el sello de Alan McGee disfrutaba de uno de sus momentos más dulces. Francis MacDonald (TEENAGE FANCLUB, NICE MAN) fue miembro de la banda y mano derecha de Duglas hasta 2005. Kurt Cobain dijo que si pudiese tocar en cualquier otra banda, lo haría en BMX BANDITS. The Guardian dice que “son el ejemplo máximo de la banda británica de culto”. Otra gran revista como Q dice que Stewart es un “gran genio amable”. Y aún así con todo, siempre ha sido una figura presente en el desarrollo de la escena pop escocesa emergente. Y si no que le pregunten en su momento a Ally Kerr o BELLE & SEBASTIAN, o por nombrar algunos que todavía no son muy conocidos, TEEN CANTEEN o HAPPY MEALS.
Y ¿por qué no son el grupo más conocido del mundo? Eso es parte de la leyenda, de esa figura de pequeño-gran hombre que transmite Duglas, de su genialidad, de sus letras, a veces hilarantes, a veces crudas. Como ejemplo, podríamos recordar la salida de la que muchos dicen es su mejor canción: “Serious Drugs”. En Radio 1 todos los DJ’s decían que iba a ser el salto definitivo a la fama, todos los ingredientes estaban ahí: Creation Records en un gran momento, el punto de mira de todos, la canción... Pero esa semana no se pudo poner la canción en la radio porque coincidió con una campaña antidroga. Esa es tan sólo una muesca en la historia de un hombre tan apasionante como podría serlo, a su manera, Vic Chestnutt, Stephin Merritt, Daniel Johnston o Jeff Mangum. No por nada se editó hace pocos años un DVD documental de su vida titulado “Serious Drugs - Duglas And The Music Of BMX Bandits”. Si necesitan más, ahí tienen buen material. ¿Situados? Pues vamos con el nuevo disco.
Pero hagámoslo poco a poco, porque la ocasión hay que degustarla y desmenuzar bien cada fragmento, cada nota, cada momento. Y hay mucho que desgranar, porque sabemos que una de las mencionadas “manías” de Duglas es incluir un buen puñado de canciones en cada disco. Y en este caso tenemos dieciséis. Y sí, se cuela alguna curiosa versión, como siempre. En este caso, una revisión especial del “Somewhere” de Leonard Bernstein que popularizó “West Side Story” y también de “De Mais Do Que Valsa” de Marcos Valle (a la cual, por cierto, le ha hecho una letra propia en inglés para la ocasión) y con esto garantizamos el toque brasileño que no suele faltar en las últimas referencias de BMX BANDITS. Y también está el ejercicio de sabiduría musical: “That Lonely Feeling” es una versión del dúo de hermanas THE MCKINLEYS, que tan sólo editaron 4 singles entre los años 1964 y 1965, y que colaboraron con bandas como THE ROLLING STONES o THE HOLLIES. Deliciosa. Y claro, ese “Forever” de los BEACH BOYS que da título al disco, y que grabaron también AMERICAN SPRING, la banda formada por la esposa de Brian Wilson y su hermana, cuyo único disco fue producido por el propio Brian. Toda una declaración de intenciones, ese halo de clasicismo, de emoción, de elegancia, de aquel tiempo en el que el pop reinaba.
Y por supuesto, a lo largo de las canciones está esa diversidad estilística que le ha clasificado como una gran melómano a lo largo de todo el mundo, y está ese espíritu clásico que recuerda a Michel Legrand (“My Girl Midge”), a Phil Spector (“No Matter What You Say”), a Burt Bacharach (“That Lonely Feeling”), a THE BEATLES (“Way Of The Wolf”), y está ese pop pluscuamperfecto, animoso, vital, colorista, redondo, con pedigrí escocés (“Saveoursmiles” compuesta con Francis MacDonald para el disco que hicieron junto a Yeongene hace uños años, y “Life Without You”). Tenemos cambio de voz femenina de nuevo, en este caso con la presencia y protagonismo (no sólo a las voces, también en múltiples instrumentos) de Chloe Philip, que borda algunos de los mejores temas del disco, como ese maravilloso “Love Me 'Till My Heart Stops” que nos conmueve y entristece al mismo tiempo, y que ella misma compone. Emoción en estado puro. Como la de “How Not To Care”, un medio tiempo misterioso que va poco a poco dejando entrar la luz entre los ritmos sintetizados y los colchones de teclados, a medio camino entre FUTURE BIBLE HEROES y EAST RIVER PIPE. O la exquisita “It's In Her Eyes”, con esa entrada deliciosa que da paso a una tonadilla sorprendente, ágil, primorosa, que nos lleva a los mejores momentos de los musicales de Broadway. Podemos evocar una historia de amor y desamor en ese diálogo musical que establecen Duglas y Chloe. Y como regalo, como guinda al pastel, ese “Razorblades & Honey” que nos recuerda al Edwyn Collins más majestuoso, y que cuenta con la presencia de Anton Newcombe (BRIAN JONESTOWN MASSACRE). Al final, nos acordamos de lo que el propio Stewart dice “I like art that bypasses the intellect and goes straight to the heart” (Me gusta el arte que puentea el intelecto y va directo al corazón).
Pero si hay un nombre clave en este disco es el de Stuart Kidd. Stuart es uno de los músicos más queridos y prolíficos de Glasgow. Se unió originalmente a los BMX BANDITS EN 2002 y después de un breve descanso regreso al grupo. Ha tocado en JONNY (Norman Blake y Euros Childs) además de ser miembro regular de banda de Euros Childs. También ha tocado con LINDEN, GULP, Ian McCulloch, Nick Garrie, Francis Macdonald, THE PEARLFISHERS, BELLE & SEBASTIAN y muchos más. También es el principal compositor y cantante de sus propios proyectos: THE WELLGREEN, KIDD, DR. COSMO'S TAPE LAB y POUND STORE RIOT. Su participación en “BMX Bandits Forever” ha sido clave, tanto en las labores de producción e interpretación, como en las de composición, aportando a prácticamente todas las canciones un plus que las ha llevado hasta el altar en el que nos las hemos encontrado. La mano derecha de Duglas en este viaje a la eternidad. Un nuevo viaje que ha sido ilustrado de nuevo por Duprez, uno de nuestros diseñadores favoritos que sabe como nadie envolver las canciones de BMX BANDITS y reflejar el universo visual que tanto cautiva a Duglas.
Pero no podemos olvidarnos de algo que ha caracterizado siempre los discos de BMX BANDITS. La búsqueda del amor perfecto en la forma de la canción pop perfecta, y todas las frustraciones que surgen de semejante quimera. Desde lo divertido a lo crudo, expresando las cosas con palabras que sólo Duglas T Stewart puede articular. En este caso, hay varias canciones que coinciden en el sufrimiento de concebir el mundo sin ese amor perfecto, absoluto, pero siempre dejando que entre la luz, manteniendo la esperanza en la importancia del amor como sentimiento en la vida de todos.
Porque “BMX Bandits Forever” es desde ya un clásico. Por espíritu (por qué ese título, si no), por composiciones, por inspiración, por referencias, por emoción. En definitiva un disco que sin duda será una de las referencias del año para Elefant Records. Y probablemente para la carrera de Duglas T Stewart. Y, claro, para todos los que amamos el pop. Y la música.