Adelantar una canción de un nuevo disco de LA BIEN QUERIDA, además de una gran noticia, es todo un desafío. Y especialmente este, en el que una sola canción no puede dar una visión suficiente de una propuesta tan variada. Así que hemos elegido dos… Y nos hemos quedado muy cortos: “Fuego” (el nuevo álbum de LA BIEN QUERIDA) está repleto de grandes canciones, de momentos únicos que sitúan la tra…
Adelantar una canción de un nuevo disco de LA BIEN QUERIDA, además de una gran noticia, es todo un desafío. Y especialmente este, en el que una sola canción no puede dar una visión suficiente de una propuesta tan variada. Así que hemos elegido dos… Y nos hemos quedado muy cortos: “Fuego” (el nuevo álbum de LA BIEN QUERIDA) está repleto de grandes canciones, de momentos únicos que sitúan la trayectoria del grupo en lo más alto. Están en su mejor momento.
Ana lo explica muy bien: “La melancolía que desprenden mis canciones siempre tienen una cara positiva que me ha permitido tirar fuerte de la vida y en este disco más que en ninguno se vislumbra ese lado positivo. Es un disco que habla mucho del deseo que reivindica la vida, el placer, la autorrealización, la libertad. El proceso de vivir establecido por el deseo. Un deseo que no es oscuro ni confuso sino luminoso y claro”.
“Fuego” vuelve a ser una auto-reformulación que nos permite redescubrir a LA BIEN QUERIDA. Musicalmente hay un poco de todo lo que conocíamos pero transgredido: el punto castizo y descarado de “Romancero”, la fusión latina y tropical de “Fiesta”, la contundencia electrónica de “Ceremonia” y la oscuridad afligida de “Premeditación, Nocturnidad Y Alevosía”. Pero vamos con las dos canciones de este primer single. “7 Días Juntos” es la narración de una historia de amor ardiente y breve, desencontrada y placentera, entre la cumbia y el dub, a golpe de sintetizador y de neones de restaurante chino (como el que aparece en el video-clip de Juanma Carrillo, que como en el disco anterior, ha sabido enriquecer, a base de imágenes, las canciones de LA BIEN QUERIDA, creando unos video-clips que tienen ya identidad propia). Ecos de STROMAE y del Hot Latin Dub, y con un final portentoso: Joan Miquel Oliver cantando los versos traducidos de su canción “Dins Un Avió De Paper”, que parece haber sido hecha a propósito para encajar perfectamente. Lo llaman magia. O genialidad, pero es la consecuencia directa de una producción acertada gracias a las ideas alocadas que deambulan por la cabeza de David. “Dinamita” nos ofrece la otra cara de una moneda con múltiples lados. Melancolía, elegancia, algo del espíritu crooner de Scott Walker y Dusty Springfield, sobriedad y lirismo gracias a las cuerdas de Jordi Montero y al bajo de Laura Antolín (DOBLE PLETINA). Emoción a flor de piel.
Pero aun queda mucho por descubrir, un dueto con J de LOS PLANETAS en clave de rumba, las conexiones con Lucio Battisti, OMD o Lana del Rey, el universo de Ana plasmado majestuosamente en la portada del álbum... Lo iremos descubriendo, y disfrutando, poco a poco, hasta el 6 de octubre, fecha oficial de salida de “Fuego”, un álbum que es un tratado vital sobre los deseos inconfesables, las pasiones irracionales, todas esas cosas que a veces se escurren entre los recovecos de la moral popular, pero que están llenas de vida y libertad. Nos hemos vuelto a rendir a los pies de Ana Fernández-Villaverde y David Rodríguez.