Cada vez que en la oficina de Elefant Records recibimos nuevas canciones de Giorgio Tuma, nos deshacemos entre elogios comentando el infinito genio de este compositor italiano. Capaz de llevar el tropicalísimo a las melodías de Henry Mancini, heredero del poso melódico de grandes de su país como Gino Paoli, y fantástico soñador en viaje espacial en compañía de Brian Wilson, la música de Giorgio Tuma…
Cada vez que en la oficina de Elefant Records recibimos nuevas canciones de Giorgio Tuma, nos deshacemos entre elogios comentando el infinito genio de este compositor italiano. Capaz de llevar el tropicalísimo a las melodías de Henry Mancini, heredero del poso melódico de grandes de su país como Gino Paoli, y fantástico soñador en viaje espacial en compañía de Brian Wilson, la música de Giorgio Tuma es la banda sonora perfecta para el paraíso. No podemos imaginarnos mejor música para aderezar momentos de placer extasiante e infinito.
“In The Morning We'll Meet” ha sido un paso de gigante hacia ese reconocimiento mundial necesario para un artista de semejante cariz, como han querido recalcar recientemente en la prestigiosa revista Mojo, donde han calificado con cuatro estrellas el disco, no sin antes invitar a sus lectores a “sucumbir ante un clímax del que no se puede escapar, semejante al de las grandes escenas de seducción”. Y como buen seductor, Giorgio Tuma va mostrando sus armas gota a gota, dejándonos siempre con ganas de más.
La última es el single digital “Innocenza Cetra”, tema de excelso romanticismo extraído del disco antes mencionado, que parece una oda mediterránea escrita bajo un manto de estrellas, mecidas por el arrullo de henchidos violines. “Montegrappa” es un tema inédito, clara demostración de los terrenos en los que mejor se mueve Tuma, con un jazz-pop lleno de delicados arreglos, con vientos que explotan entre sintetizadores que nos hacer perder cualquier síntoma de gravidez, y melodías inolvidables. Por último, “Gorni Koala”, extraída de nuestro recopilatorio Space Escapade es un refrescante baño en las playas de Bahía, con ese sol que desmenuza cada una de sus partículas luminosas bajo el efecto del mar. Un tratamiento perfecto para tratar el pesimismo.
Y mientras disfrutamos de esta última referencia, seguimos mirando embobados el cielo, pensando en todos esos momentos que nos negamos a olvidar, esperando nuevas canciones de Giorgio Tuma, que nos recuerden lo maravilloso que es vivir.