La mejor juventud: L-KAN han dado color a noches interminables en las mejores pistas tecno-pop de Madrid con discos como “Cosas que miden poco” o “Discazo”. Pero llega el momento de cambiar el rumbo, de abrir puertas, de probar cosas nuevas y la urgencia irreverente se convierte en incontenible inquietud. Luis y Belén (por cierto, grandes activistas de la noche madrileña, responsables de salas como el Ocho y Medio y el Elástico) deci…
La mejor juventud: L-KAN han dado color a noches interminables en las mejores pistas tecno-pop de Madrid con discos como “Cosas que miden poco” o “Discazo”. Pero llega el momento de cambiar el rumbo, de abrir puertas, de probar cosas nuevas y la urgencia irreverente se convierte en incontenible inquietud. Luis y Belén (por cierto, grandes activistas de la noche madrileña, responsables de salas como el Ocho y Medio y el Elástico) deciden formar BLA (proyecto paralelo a L-KAN) para dar rienda suelta a todo lo que les bulle en la cabeza, buscando un sonido más orgánico con letras con un toque más incisivo. Y la primera muestra de todo esto es “La mejor enfermedad”, un disco que sitúa en escena a dos compositores con las ideas muy claras, una propuesta novedosa entre las manos, y una habilidad con las melodías y los arreglos poco común. De la fantasía de “Cómo seremos” a la irreverencia de “Los exnovios”, de la delicadeza de “Yo soy como Portugal” a la introspección de “Mira lo que se oye cuando estamos callados”. De ese nada disimulado guiño a la pista en “Siempre hay una más” al pop pluscuamperfecto de “La canción que nunca llegó a serlo”. Luis y Belén han traído bajo el brazo una propuesta refrescante, original, novedosa y sobre todo divertida, asimilando la herencia de los mejores representantes del pop en castellano: LOS FRESONES REBELDES, ASTRUD, FAMILY, CARLOS BERLANGA, CHICO Y CHICA y más. Todo el mundo hablará de BLA y de su gran enfermedad.