Trembling Blue Stars
The last holy writer
Con este título y el trabajo de diseño que cubre la portada del nuevo trabajo de Trembling Blue Stars ya encontramos algunas referencias a lo que podemos encontrar en el interior. Dejando atrás uno de los mejores álbumes de hace tres años The Seven Autumn Flowers (Elefant, 2004), The Last Holy Writer (Elefant, 2007) ya advierte sobre cierto vínculo con estados ascéticos, melancólicos e intimistas, en los que la formación del prolífico Bobby Wratten encuentra sobrada inspiración.
Con este sexto disco, lleno de temblorosa dulzura y romanticismo, los británicos vuelven a demostrarnos porqué son una de las bandas más influyentes del pop actual y del pop de siempre. Y no sólo por el legado de las anteriores formaciones lideradas por Wratten (The Field Mice y Northern Picture Library, lanzadas por el legendario Sarah Records), sino porque continúan ofreciéndonos trabajos con una calidad excelente desde la creatividad y la composición musicales. Y muchas de las canciones pop más bonitas que hemos escuchado. Con una coherente evolución y tres años después de su último álbum, nos regalan doce nuevas canciones envueltas por una delicada producción. Acogiéndose a un buen catálogo de arreglos y efectos electrónicos, la oscuridad latente en el disco deja también un espacio para reconocer el optimismo y la luz dentro de la experimentación. Pero mucho más reconocemos el uso de las cajas de ritmo, las guitarras pop (acústicas y eléctricas), las espléndidas líneas de bajo, los teclados y el órgano, el matiz del carrillón o la melódica, los arreglos de cuerda y los coros celestiales… Recursos todos ellos que, articulados con precisión y mimo, ofrecen soporte para la tan inconfundible e influyente voz de Bobby Wratten. Quien, después de su última colaboración vocal para uno de los temas del exquisito trabajo de Future Conditional (We don’t Just Dissapear, LTM, 2007), vuelve para ofrecernos un nuevo gran disco que oscila entre el dreampop, el indiepop, el shoegaze y la new wave. Con colaboraciones de lujo y habituales, como las de Ian Catt (Saint Ettiene) o Beth Arzy (de los fantásticos Aberdeen) y otras nuevas, como la de Daniela Neuhäuser (de los shoegazers Malory). Y los recuerdos de siempre: Slowdive, Galaxie 500, Mazzy Star, The Wake, Joy Division, The Cure y toda su herencia musical. Sin bajar la guardia: del mejor pop de estas estrellas temblorosas.
Trembling Blue Stars [NoTodo]
foto: Archivo Elefant