The School
Efe Eme [Es]: "Wasting away and wandering" [Crítica]
Discos: “Wasting away and wandering”, de The School
“La cuidada instrumentación y producción de cada uno de los doce temas que se han incluido en este tercer elepé de The School son uno de los mejores activos de este disco, que fluye en el reproductor con extraordinaria amabilidad, sin estridencias y sin altibajos de calidad compositiva”
Luminosa y radiante tercera entrega en forma de LP de The School, la banda de pop galesa liderada por la Liz Hunt, que firma la docena de composiciones del disco. “Wasting away and wandering” sigue la estela de sus predecesores, “Loveless unbeliver” (2010) y “Reading too much into things like everything” (2012), todos ellos editados por Elefant. The School se mantiene firme en su apuesta por un pop prístino de influencias “sixties”, entre las que se destacan el soul del sello Motown, los grupos vocales femeninos, Phil Spector o el ye-yé francés. Este tercer LP se abre con ‘Every day’, una canción de aire folk-pop con una letra melancólica pero de alegre en su ejecución instrumental. Una característica que se repite a lo largo del disco.
Por norma general, las letras de Hunt tienen un aire lánguido y nostálgico y están centradas en el amor, el desamor, la ausencia y las siempre complicadas relaciones personales. La virtud de The School es que todos estos mensajes se lanzan al aire con una sonrisa, con un optimismo rítmico como el que eran capaces de hacer The Supremes. Un ejemplo de ello es ‘Love is anywhere you find it’, ‘Wasting away and wandering’ (la más meláncolica de las canciones del elepé) o ‘Don’t worry baby (I don’t love you anymore’, directamente emparentada con ‘Will you love me tomorrow’ de The Shirelles.
‘He’s gonna break your heart’ es la conexión con el yeyé francés. La voz de Liz Hunt fluye como en una de las dulces y frágiles canciones de Françoise Hardy mientras que ‘Put your hand on me’ destaca por el protagonismo de la sección de cuerdas, que le confiere un coqueto aire “northern soul” al tema. Son precisamente la cuidada instrumentación y producción de cada uno de los doce temas que se han incluido en este tercer elepé de The School (editado en vinilo y CD), uno de los mejores activos de este disco, que fluye en el reproductor con extraordinaria amabilidad, sin estridencias y sin altibajos de calidad compositiva. Y para acabar, les cuento un secreto: en las últimas semanas “Wasting away and wandering” nos ha acompañado en casa durante los desayunos familiares. Ha sido una buena manera de empezar el día con energía.