"La ventaja de ser minoritarios es que tus seguidores siguen ahí cuando reapareces”

BLA

Bla, el proyecto post L-Kan de Belén y Luis está de regreso con un segundo disco bautizado como “La falta básica”.

Han pasado dos años desde su anterior trabajo, un tiempo que para Belén y Luis, resumen de manera muy clara. “Ni mucho ni poco. Es lo que hemos tardado en componerlo, grabarlo y en que se fabrique. Nos ha pillado con unos cuantos líos laborales y personales, pero tampoco teníamos mucha prisa. La ventaja de ser de minorías es que tus seguidores siguen ahí cuando reapareces”. 

Demasiado intrascendentes para ser normales y, de manera equivocada, encasillados en ese tipo de bandas que hacen de la ironía, del costumbrismo y de lo trágico-cómico su forma de acordarse de la madre de cualquiera, les sigue sorprendiendo esa falta de ubicación sobre su proyecto. “No entendemos de verdad por qué puede no parecer especialmente serio. La seriedad no es expresarte de una determinada manera 'indiemente' correcta, sino ser fiel a tu manera de contar las cosas. Sabemos que no somos perfectos interpretes pero somos lo que somos y lo contamos como sabemos. No somos ni normales ni raros, pero estamos contentos con los que nos aprecian”. 

“La falta básica” no es un disco de ukeleles, ni de rock, ni de sintetizadores, pero estos últimos dejan alguno de los mejores momentos de un álbum de nombre curioso y, desde luego, nada superficial. “Es un libro de Michael Balint, un psicoanalista inglés de origen húngaro. Esta teoría habla de una falta inexplicable, de un vacío existencial y una carencia de identidad que sienten algunas personas por una falta de atención que ocurrió en la primera infancia antes de desarrollar el lenguaje”.