Maitena dibuja escuchando Elefant
En el mes de noviembre se publicó en España y Argentina el libro "Curvas Peligrosas" (Editorial Lumen), una recopilación de tiras e ilustraciones de la brillante dibujante y humorista argentina Maitena, que en España podemos seguir semana a semana en su página de EPS, suplemento dominical del diario El País. El libro, que se presenta el jueves 11 de noviembre en la FNAC Callao de Madrid, viene acompañado de un CD del mismo título con diez canciones escogidas por la propia ilustradora, entre las cuales se encuentran temas de Ana D y ENTRE RÍOS, editados por Elefant.
Continuadora de las célebres "Mujeres Alteradas", esta nueva serie recorre caminos distintos, más complejos y abarcadores. A clásicos como las neurosis femeninas, la pareja, los hijos, el cuerpo, se suman aquí nuevos temas: las conductas sociales, los comportamientos contemporáneos, las modas, el consumo. En sus propias palabras: "Dibujar es un trabajo solitario. A veces necesito silencio y a veces música. Los temas de este disco me acompañaron el último año y medio mientras hacía este libro. Quería compartirlos con ustedes". Las viñetas de Maitena son reproducidas, además de en El País en España, en Le Figaro (Francia), La Stampa (Italia), Público (Portugal) o La Nación (Argentina), entre muchos otros.
Para el disco, Maitena Burundarena (Buenos Aires, 1962) ha escogido algunas de sus canciones preferidas de los últimos tiempos. Junto a clásicos como Paquita la del Barrio, estrellas de la música argentina como Vicentico o BERSUIT, y compatriotas que trascienden las fronteras como Juana Molina o Axel Krygier, Maitena ha escogido del catálogo de Elefant la belleza de "Más" (la personal versión de Riz Ortolani incluida en el único álbum hasta el momento de Ana D) y la electrónica melódica de "Litoral", una de las hermosas composiciones del grupo argentino ENTRE RÍOS.
Maitena parece un personaje de sus historietas: madre de tres hijos de tres padres distintos, entre el primero y el último transcurrieron veinte años en los que pasó de todo. Fue ilustradora de manuales escolares, dibujante de cómics eróticos, tuvo un kiosco y un restaurante, hizo guiones de televisión. Trabajó de lo que pudo hasta que el éxito llamó a su puerta, y ella le abrió. Ahora vive entre Buenos Aires y un pequeño pueblo uruguayo, desde donde intenta refutar aquel axioma que dice que cuanto mejor le va a uno más tiene que trabajar.