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21/03/2018

Segundo Premio [Es]: Entrevista a Linda Guilala



 

Lanzadera #4:

 

Entrevista a Linda Guilala

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Hacemos unas preguntas a Iván, baterista de Linda Guilala, con motivo de la inminente visita de la banda a Madrid para participar en el nuevo Proyecto Waikiki.

 

Para quién no os conozca, contadnos quiénes sois Linda Guilala, qué hacéis y cuándo dejasteis de sembrar el terror en Tokio.
Linda Guilala somos Eva, Iván y Mari. Eva e Iván proceden de los extintos Juniper Moon y Mari de una banda llamada Visceral Eyes. Creo que dejamos de sembrar el terror en Tokio en el momento en el que el sci-fi dejó de ser una válvula de escape válida para nosotros. Durante mucho tiempo nos resultó más fácil hablar de monstruos en nuestras canciones que de nosotros mismos, así que en el momento en el que dejamos de escondernos detrás de ellos se quedaron guardados en el cajón.

Según vosotros, ¿cuándo una banda deja de ser emergente? ¿Os incomoda ese adjetivo?
Pues no lo sé, no tengo ni idea. Nunca me he sentido emergente ni nuevo en nada, y tampoco sé muy bien en qué consiste serlo. Es cierto que el grupo en los últimos tres años sigue una línea de progresión ascendente en algunos sentidos y mucha gente nueva comienza a conocerlo o simplemente prestarle atención por primera vez. Pero lo cierto es que Eva y yo llevamos un montón de años tocando y además procedemos de otro grupo, de una época en la que ese término ni era un recurso ni estaba continuamente en boca de todo el mundo. Lo vivimos como una cosa más, otra etiqueta de esas.

Intuimos que la dedicación a la música ocupará un espacio muy grande de vuestro tiempo. En vuestras relaciones laborales, diarias, personales… ¿qué lleva consigo el ser músico?
Bueno, nosotros somos músicos y después hacemos otras cosas para poder llenar la nevera. Hace mucho tiempo que es así y vivir bajo esos parámetros lo condiciona todo, desde el coche que conduces a la casa en la que vives. No nos engañemos, no es fácil, no es divertido. Esa idea romántica que tiene alguna gente es sólo eso, sólo una idea romántica, la realidad es mucho más dura y complicada de lo que la gente puede llegar a imaginar. Así que, bueno, si decides vivirla tienes que estar muy convencido y comprometido con una escala de valores un poco diferente que choca prácticamente con todo lo que deberías estar haciendo según tu entorno.

¿Consideráis que el modelo musical actual ayuda a las bandas emergentes? ¿En qué creéis que es necesario hacer cambios?
La música en general siempre ha significado cambio y evolución. La forma en la que evoluciona el modelo actual no es más que el reflejo de como evoluciona la sociedad. Es curioso como internet, que a priori se suponía una liberación y facilidades para grupos y público, se ha transfomado de un pozo de ego en la que los grupos ya no venden canciones, venden supuesto éxito y publicaciones. Y por otro lado, como el público, teniendo una cantidad inabordable de información, desconoce las cosas más elementales y sólo conoce trozos e ideas superficiales. No estoy diciendo que todo esto sea malo, es sólo otra evolución de la que sinceramente creo que también saldrán cosas buenas, nuevos estilos y formatos adaptados a los nuevos leguages audiovisuales. Supongo que al final y paradógicamente la gente con inquietudes similares, que tampoco termina de estar agusto con estas cosas, se está encontrando en la red y creando nuevas líneas de trabajo. Si cambiaríamos algo es el abuso, injusticia y porcentajes de reparto que estamos percibiendo autores, editores y discográficas independientes de determinadas plataformas digitales, nos parecen una vergüenza.

¿Qué opinión tenéis de los festivales que inundan la programación?
Creo que los hay mejores y peores y que no todos son festivales, al menos como yo entiendo el concepto festival. Está claro que tienen un público masivo y apoyo institucional y que por eso se hacen. Me parece bien, es evolución y también está dando pie a que gente descontenta con determinados modelos de gestión esté optando por otras vías y organización de otro tipo de eventos. Todo está bien, todo tiene su público. En parte añoro cuando los festivales eran mucho más pequeños y eran el punto de encuentro para gente con inquietudes similares. Esos festivales en los que el cartel era verdaderamente importante y la gente quería ver a los grupos. No sé, tal vez nunca fue así, pero yo lo recuerdo de esa manera, como algo mucho más excepcional, una verdadera comunión entre amigos.

Se ha reducido al 10% el IVA aplicado a la música en directo, ¿qué suponen estas pequeñas victorias en el mundo emergente?
Nada. No nos dejemos engañar… Lo único que se ha hecho es reducir el IVA en la venta de entradas, lo demás sigue todo igual.

Además del cine de serie B, ¿qué otros referentes extramusicales os han ayudado a dar forma a vuestra propuesta?
Pues no lo sé, supongo que el entorno, cuando nos mudamos a Vigo desde Santiago nos volvimos más ruidosos. Muchas veces creo que fue esta ciudad, el aire decadente, las fábricas abandonadas, la pobreza en las aceras, la pulsión que los turnos de trabajo de las factorías producen en la ciudad… Todo eso nos marcó bastante los últimos años.

¿Qué pesa más en vuestro proceso compositivo, el elemento ambiental o la parte melódica?
Creo que la parte emocial. Buscamos sentir cosas, tanto con las frases como con las texturas, no podemos separar una cosa de la otra. La verdad es que en algunos momentos nos tenemos que contener para no llevar las cosas a un plano totalmente abstracto.

Todos vuestros trabajos han sido grabados en vuestro propio Kaiju Estudio. ¿Hasta qué punto consideráis el propio estudio como un instrumento más?
Sí, lo es, y cada vez más. Pero en nuestro caso procuramos que todo sea lo más real posible, trabajamos y grabamos los efectos en las pistas directamente y estos mismos efectos son los que utilizamos en directo. Es algo con lo que muchos productores no comulgan y con lo que se llevan las manos a la cabeza: «¿Como podéís grabar con toda esa reverb y delay?». Procuramos no hacer nada en el estudio que luego no podamos hacer en directo y si en algún tema pasa y finalmente entra en un disco, lo sacrificamos para el directo.

Vuestros videoclips han sido siempre muy cuidados, ¿cuál es la importancia del aspecto visual para Linda Guilala?
Es de las pocas cosas que no está en nuestras manos al 100%, nos importa mucho y es complicado. Cuando tienes todo el control creativo sobre las grabaciones o el diseño de las portadas, luego ponerlo en manos de cualquiera para ponerle imágenes es un proceso extraño, porque claro, ya no eres tú, ya no es tu cabeza, ya no son tus ideas ni tu punto de vista, o al menos no al 100%. Afortunadamente tanto Javi Camino como Sara Chuerches nos saben escuchar y entender, les estamos agradecidos por toda su paciencia.

¿Qué viene después de Primavera negra? ¿Es el adelanto de un próximo largo?
Estamos grabando, siempre estamos grabando y haciendo cosas, puede que hagamos otro single, o un EP, un miniLP o un largo, cualquier cosa es posible. Realmente nos da un poco igual, lo único importante es que haremos algo que nos emocione a nosotros y si es así se lo enseñaremos a la gente, si no es así trabajaremos hasta que tengamos algo que creamos adecuado. No tenemos prisa, no nos interesan los parámetros estándar, esas cosas de «ahora toca otro LP». Creo que los grupos algunas veces se pierden en esas cosas y en España más.

Por último, recomendadnos algún artista que hayáis estado escuchando últimamente.
Pues yo estoy muy enganchado a Qual. Me fascina todo, esa mezcla de post-punk, electrónica y rollo gótico-siniestro. Creo que es uno de los grandes talentos europeos por descubrir, aunque no creo que vaya a tener una acogida especialmente eufórica entre el público indie español, es otra cosa supongo. Pero bueno, escuchamos de todo. Acaba de editar su segundo álbum y ahora mismo es lo que está sonando. «Take Me Higher» me hace bailar y sentir un montón de cosas. Mañana será otra cosa más pop o más punk, o dub… la musica es así.

Este sábado, 24 de marzo, podrás disfrutar de su directo en la capital junto a El Buen Hijo en Maravillas Club. Concierto organizado por Proyecto Waikiki. Puedes adquirir aquí tu entrada.

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

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